la adicción a los juegos electrónicos, se está extendiendo rápidamente por todo el mundo. Según el Papa, los jóvenes están jugando en su vida social, sus estudios y su bienestar psicológico. Los adictos a videojuegos reciben calificaciones más bajas en la escuela y son más propensos a ser diagnosticados con problemas de déficit de atención. Por lo general, los adictos a las consolas de juegos tiene en su habitación y pasan una media de 24,5 horas por semana, disparando los villanos de los mundos virtuales. El estudio también llama problemas de pareja y peleas, y la obesidad, la adicción a los videojuegos. Si hubiera una mayor participación de los padres y educadores para escuchar lo que dicen los niños, problemas como el aislamiento y la frustración puede ser cortada de raíz, lo que lleva a estos jóvenes en el mundo virtual al mundo real.